El Papa pide llevar una esperanza a los presos

Rechazo a la pena de muerte y a la cadena perpetua

CIUDAD DEL VATICANO (EFE).— El papa Francisco recordó ayer a los presos y pidió que no haya condenas “que no dejen una ventana de esperanza”, durante la audiencia general celebrada en el aula Pablo VI.

El Pontífice recordó en su catequesis “a nuestros hermanos y a nuestras hermanas que están en la cárcel” y aunque señaló que “es justo que quien se ha equivocado pague por su error, es igualmente justo que quien se ha equivocado pueda redimirse del propio error”.

Por ello, alegó que “no puede haber condenas sin una ventana de esperanza” y pidió a los fieles que piensen en los presos “para que encuentren a través de esa ventana de esperanza una salida para una vida mejor”.

El Papa siempre se ha expresado completamente en contra no sólo de la pena de muerte, sino también de la cadena perpetua al considerarla “una sentencia a muerte escondida”.

Francisco apareció en la audiencia general sin cubrebocas y así saludó a varios cientos de presentes, quienes sí están obligados a llevar un cubrebocas del tipo FPP2.

Anteayer el Vaticano informó de que tanto el secretario de Estado, Pietro Parolin, como su “número dos”, Edgar Peña Parra, dieron positivo al coronavirus.

Pésame

Al final de la audiencia, el Papa saludó al matrimonio Flores Chévez, padre boliviano y madre ecuatoriana, que desde hace 30 años viven en Italia, para darles el pésame y expresar su cercanía tras la muerte en un accidente de tránsito de sus dos hijas, Antonella y Lorena.

Fue el mismo padre, Luis Flores, periodista en Italia, quien publicó la noticia en la página web que creó para informar a los inmigrantes hispanoamericanos en Italia, después del trágico accidente: “La familia Flores

Chévez está de luto, Antonella y Lorena Flores Chévez han dejado trágicamente de existir. Que en paz descansen... mis divinas hijas”.

Justo ayer se cumplió un mes del accidente y tanto Luis Flores como su esposa,

María Chévez, pudieron acudir a la audiencia para contárselo al Papa, quien expresó emoción y bendijo algunos de los objetos y fotos que les llevaron, explicó el matrimonio.

El accidente conmocionó a la comunidad hispanoamericana en Roma, pues es una familia conocida debido a la actividad del padre, que es también presidente de la Asociación Sentir Latino, y que lleva 28 años viviendo en el barrio de Centocelle.