Andar juntos y escuchar

Llamado al nuevo párroco en misa en Chicxulub Pto.

PROGRESO.— La llegada de un nuevo párroco no quiere decir borrón y cuenta nueva, ni tampoco es criticar al que se va ni echar por tierra todo el trabajo realizado por el párroco anterior, sobre todo porque la comunidad con la que trabajó aquí permanece, dijo el arzobispo de Yucatán, Gustavo Rodríguez Vega.

El prelado dio posesión al padre Alejandro Acosta Verez como párroco de Nuestra Señora de la Asunción en Chicxulub Puerto ante fieles de esta comisaría, Ixil y Chicxulub Pueblo que asistieron anteanoche a la misa que celebró con los sacerdotes Miguel Pech Alonzo, desde ayer párroco de Santa Inés en Dzitás, y Jesús Tec Canché, vicario parroquial en Panabá, y el diácono permanente Víctor Valle Aguilar.

“Padre Alejandro te vamos a encomendar un proyecto ya aprobado para renovar el templo para que sea más funcional y más hermoso, y con la ayuda de Dios y de toda la comunidad ese proyecto sea una realidad”, dijo monseñor Rodríguez Vega.

Al comenzar la ceremonia de toma de posesión, el padre Acosta Verez tocó las campanas para llamar a los fieles a la misa.

Luego, el Arzobispo y él entraron a la iglesia, enseguida le entregaron las llaves de la parroquia y las enseñó a los feligreses, quienes entonces le aplaudieron.

Después el padre Pech Alonzo, como titular del Decanato 6, leyó el nombramiento del padre Alejandro como párroco de Nuestra Señora de la Asunción en Chicxulub Puerto y administrador parroquial de San Bernabé en Ixil.

Posteriormente, continuó la misa y el nuevo párroco ante el Arzobispo recitó el Credo y, de rodillas ante el prelado, realizó su profesión de fe e hizo el juramento de fidelidad a la Iglesia Católica y de promover la fe católica con obediencia cristiana.

En su mensaje, monseñor Rodríguez Vega dijo que comienza una nueva página de la historia de esta comunidad parroquial con la llegada de un nuevo párroco que viene de un puerto a otro puerto, trae una misma línea de contacto con la comunidad.

“Padre Alejandro es muy importante caminar con la misma comunidad, caminar es sinodolidad, es decir, caminar juntos y para hacerlo es indispensable escuchar.

“Un sacerdote, por más inteligente y trabajador que sea, debe atender a lo que diga la gente, tomar en cuenta el sentir de la palabra del pueblo de Dios y respetar a la comunidad en general.

“Claro que en las reuniones del consejo parroquial serán muy valiosas para él, también con el concepto de recursos económicos, pero además algunos encuentros con la comunidad en general para que ellos te ayuden e indiquen que en el cuerpo de Dios también está el Espíritu Santo, que es el que guía nuestra iglesia que nació en Pentecostés con la venida del Espíritu Santo, y cuando se perdonan los pecados y todo lo que se hace se invoca al Espíritu Santo”, indicó.

A la misa asistieron los expárrocos de Chicxulub Candelario Jiménez Jiménez y Jenaro Rodríguez Colomé. No asistió ningún sacerdote del Decanato 6, integrado por Progreso, Chelem, Conkal, Mocochá, Baca y Cholul.

Al terminar la misa se ofreció un convivió de bienvenida al nuevo párroco.—